Ecos de una ciudad sumergida.

Translator / traducteur / übersetzer / traduttore...

domingo, 8 de mayo de 2011

ARENNA - Beats Of Olarizu (2011)


Esta es la cuarta reseña que hago de este disco, y la primera en ver la luz. Un mes degustando un álbum que me ha proporcionado visiones diferentes desde diversos ángulos con cada escucha. Cansado de rehacer constantemente las líneas que iba escribiendo, y una vez convencido de que estaba ante uno de esos trabajos tan ricos en matices y sensaciones que me iba a acabar volviendo loco sepultado entre hojas llenas de párrafos tachados, he decidido colgar mis impresiones acerca de él incluso antes de poner el link de descarga. Muchos os extrañaréis de esto, ya que es la primera vez. La explicación es muy clara: Arenna son colegas, y dado que presentan oficialmente el álbum este Viernes en la sala Helldorado de Gasteiz junto a los estadounidenses Hogjaw, hasta el día siguiente (o sea el 7 de Mayo) no pondré el enlace para que lo podáis bajar. No lo había hecho antes, pero creo que comprendréis perfectamente esta excepción. Una vez hechas las aclaraciones, pongámonos manos a la obra. Arenna es un quinteto vasco procedente de la siempre helada Gasteiz, y Beats Of Olarizu su flamante debut con el prestigioso sello alemán Nasoni Records, hogar de bandazas como Wo Fat, Los Natas, La Ira De Dios, Tlön o Colour Haze. Pese a la juventud de la banda y con tan sólo una demo en la calle, fechada en 2007, la calidad de sus composiciones les permiten batirse el cobre en directo junto a formaciones como Viaje a 800, Brant Bjork & The Bros., La Ira De Dios, Positiva o sus compatriotas y colegas The Soulbreaker Company. Sin embargo, la verdadera prueba de fuego para Txus (voz), Rober (guitarra), Kike (guitarra), Javi (bajo) y Guille (batería) estaba por llegar, y no era otra que la de refrendar las buenas sensaciones con un debut que les brindara el espaldarazo definitivo. Y joder si se lo han tomado en serio. Grabado a caballo entre Iruña y Madrid bajo la producción de José López Gil (The Soulbreaker Company, Viaje a 800...), la masterización ha corrido a cargo del tótem de los sonidos plúmbeos Billy Anderson (16, Bongzilla, Cathedral, High On Fire...). Y todas estas referencias, si bien impresionantes, se vuelven nimias comparadas con el shock que le invade a uno cuando le da al play y los primeros ecos de Beats Of Olarizu llegan a tus oidos.

Y es que lo que han pergreñado estos cinco tíos es algo muy serio. Cagándose en el orden natural del Universo, e invirtiendo principios y finales, Beats Of Olarizu es el tipo de álbum que el 99% de las bandas mataría por grabar en el apogeo de su carrera, y que muy pocas consiguen. Ya no es que estemos ante uno de los debuts más aplastantes que una banda de rock estatal haya compuesto nunca, sino que al primer intento Arenna se ha colocado en una posición en la que puede mirar de tú a tú a cualquier de las grandes formaciones de este sucio país. Manteniendo el poso plúmbeo de sus raíces stoner, los gasteiztarras han hecho saltar por los aires cualquier etiquetación posible con un trabajo cuyos tentáculos se expanden tanto y de manera tan hipnótica que cualquier descripción o comparación se antoja casi imposible. A través de algún impío ritual pagano, Arenna ha conseguido los favores del Maligno en forma de una orgía de riffs capaz de echar abajo todo tu edificio, combinando densidad y gancho con una facilidad pasmosa. Y eso sólo como calentamiento, porque el recurso de elevar las atmósferas de presión no es más que el cimiento sobre el cual erigir una catedral de tamaño y formas imposibles. Como si de la mismísima Kadath se tratase, Beats Of Olarizu comparte espacio con las estrellas, en un plano donde el tiempo pierde su significación y la eternidad se alcanza con los dedos de la mano. Con la base bien asegurada, la dupla de guitarras se desprende de cualquier corsé estilístico y se lanza sin miramientos a una auténtica orgía creativa donde hay cabida para la psicodelía, jams ardientes como el Infierno y la invocación de un blues retorcido y oscuro como un pantano en una noche sin estrellas. Si tu frágil alma mortal sobrevive a la experiencia que significan los 30 minutos finales de Metamorphosis in Ic (0,9168 g/cm3), sabrás de lo que te estoy hablando, así como del verdadero significado de la palabra catársis. Ayudados por una sección rítmica a prueba de bombas que aúna versatilidad y contundencia, el conjunto alcanza niveles estratosféricos, que van desde la pegada de Morning Light y Receiving The Liquid Writings a la épica desbocada y lisérgica de Eclipse. A estas alturas estaréis pensando que Arenna es una formación instrumental, porque no he mencionado el apartado vocal. Para nada, pero es que la guinda al pastel siempre se coloca en último lugar. Es muy difícil encontrar en el rock una voz a la que se le pueda etiquetar de verdaderamente evocadora, esto es, capaz de llevarte a su terreno y hacer que interiorices su propuesta en un plano más allá de las palabras, ese espacio generalmente soterrado en nuestras mentes y que se nutre de sensaciones, donde la razón jamás osaría adentrarse. Txus tiene ese tipo de voz. O más correctamente, es su interpretación vocal la que arde con esa llama. Porque no es sólo que el cabrón tenga una voz acojonante, con reminiscencias del malogrado Layne Staley, sino que además la hace brillar como un faro, como una puta estrella encerrada en una garganta. Arrancado de tu sillón y mandado a base de riffs al Universo ignoto, será su voz la que escuches y te guíe por uno de los viajes más alucinantes que el rock puede ofrecer hoy día. Paso de desgranar asépticamente ningún tema, porque ni soy músico ni crítico. Me limitaré a autofagocitarme y citar la frase con la que terminé la reseña que tuve el placer y el gran honor de escribir para la web de Nasoni acerca del álbum: "Beats Of Olarizu es la voz cuando se fusiona con el alma, el riff cuando deviene en fuego creador, el blues transformado en fuerza desatada de la naturaleza".



Un debut que da miedo. O mucho me equivoco o estamos ante el mejor disco de rock estatal de 2011. Con un artwork acojonante a cargo de la artista vietnamita Moony Khoa Le y una espectacular edición a cargo de Nasoni Records, la adquisición de una copia física de Beats Of Olarizu es más que obligada. Y el vinilo trae tres bonus tracks!!

NOTA: 9,25/10



4 comentarios:

J.M.B. dijo...

Conciertazo que se cascaron el viernes con Hogjaw! Me compré el vinilo de Arenna, no ha dejado de sonar en todo el domingo. Muy buenos.

Saludos

Cthulhu dijo...

Conciertazo, tiene usted toda la razón! A mi Hogjaw me aburrieron, pero con el show de Arenna ya toqué el cielo... La edición del disco es cojonudísima, especialmente en vinilo.

Un saludo crack!

Anónimo dijo...

creo q aun se puede descargar aqui:
http://www.mediafire.com/?prx2xf86euf9ylm

Anónimo dijo...

y su pass es:
stonedsunvibrations