Ecos de una ciudad sumergida.

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miércoles, 21 de julio de 2010

COFFINWORM - When All Became None (2010)



Y seguimos con los sorpresones, y este es tremendo. Los tíos de Profound Lore deben de tener unos sobrehumanos poderes de rastreo, porque es que van de acierto en acierto, pudiendo mostrar un catálogo de bandas en sus filas simplemente incomparable por cualquier otro sello. Alcest, Krallice, Amesoeurs, YOB, The Gates Of Slumber o Altar Of Plagues son algunos de esos "angelitos". Casi nada. Ahora le toca el turno a una banda cuya progresión sólo se puede calificar de meteórica, puesto que éste es su primer LP. Atrás queda un EP, Great Bringer Of Night, (2008) producido por Iron Bob Fouts (el batera de The Gates Of Slumber), que les convirtió en auténticos ídolos de la escena extrema de su Indianápolis natal, amén de conseguir que su nombre estuviera en boca de casi todo el mundo como una de las bandas más prometedoras de los EEUU. Algo que bastó con creces para fichar por Profound Lore y contar para la producción de su primer largo con el prestigioso y omnipresente Sandford Parker de Minsk, otro cabrón que todo lo que toca lo convierte en oro. Coffinworm es una banda envuelta en tinieblas y mala baba, y todos sus esfuerzos van dirigidos a que se hable única y exclusivamente de su música. Sus entrevistas son escasas, y sus nombres no trascienden más allá de sus iniciales. Así, D es el encargado de las voces, T y G de las guitarras, T del bajo y C hace las labores de batería. Sobre sus influencias, en su MySpace podrás encontrar cosas como "la destrucción de Cristo" o "la muerte inminente", y de sus inicios explican como nacieron bajo la mirada del todopoderoso ojo de Choronzon (el demonio creado en el s.XVI por los ocultistas Edward Kelley y John Dee, y que ya en el s. XX fue asimilado por el imaginario místico de Aleister Crowley). Para que os hagáis una idea de lo que corroe las mentes de estos bestias... Otro dato que habla de lo importantes que se han hecho en tan poco tiempo es la lista de bandas con las que ya han compartido escenario: Pentagram, Lair Of The Minotaur, Krallice, Serpentcult, The Gates Of Slumber, Wolves On The Throne Room, Nachtmystium... Acojonante.


Y su música no le va a la zaga, ni mucho menos. A lo que te enfrentas si decides escuchar When All Became None es a un ataque termonuclear aderezado con otro bacteriológico, que a la vez que te destruye sin piedad deshará tus intestinos convirtiéndote en una sopa compuesta por heces y sangre. Para ello Coffinworm han decidido utilizar todo lo enfermizo, maligno y pútrido de lo que han podido echar mano en el underground metálico estadounidense. Ajenos a fronteras o etiquetas, la banda ha compuesto un álbum en el que el doom, el sludge, el death metal e incluso el punk más iracundo se confabulan en un aquelarre de depravación como pocos habrás visto. Y todo esto con una energía desbordada, que traspasa lo estrictamente musical para convertirse en una sensación palpable de odio. Pero lo que hace de verdad especial al álbum es que a la vez que esto ocurre, en ningún momento tendrás la impresión de estar ante un disco de esos calíficados como "difíciles de oir". Porque When All Became None es el álbum de metal extremo más accesible que recuerdo. No sé exactamente como definirlo, pero es así, y a pesar de la brutalidad desplegada, todo en el disco es memorable, con un gancho realmente irresistible. Imposible no hacer headbanging como un poseso con riffs como el de The Sadistic Rites Of Count Tabernacula o Spittin In Infinity's Asshole, eso te lo aseguro. Del mismo modo, las voces son muy extremas, cercanas al death metal, pero el despliegue vocal de D es tan acojonante que tildarlas de simples gritos guturales se antoja imposible. Mención aparte merece la producción de Sandford Parker, ya que ha conseguido captar la esencia de Coffinworm a la perfección. En vez de caer en la inercia de darle a la música ese típico sonido "muralla", Parker ha comprendido que lo que hace especial al grupo es su manera única de mezclar estilos, por lo que se ha decantado por una producción que nítida, donde todos los detalles se puedan captar y disfrutar como merecen. Sintetizando, When All Became None es el álbum perfecto para que los amantes del underground metálico nos masturbemos como gorilas en celo, ya que aquí disfrutarás de Eyehategod, Autopsy, Unearthly Trance o incluso Satyricon, pero todo ello asimilado en una propuesta y demostrando que el todo es muchísimo más que la suma de las partes. 6 temas, 45 minutos, y la confirmación de que el metal extremo es sin lugar a dudas el género más inquieto y en continua renovación del panorama actual.

Claro candidato a disco del año, sin ninguna duda, y otra joya que nace para alumbrar aún más el deslumbrante firmamento de un género al que no se le ven límites.

Nota: 9,75/10


1 comentario:

Soulkiller dijo...

Jur jur jur, a éstos los conozco por ver la portada que me cautivó en su momento y que se ha hablado algo en el foro de Doom & Stoner Community de él. Creo que será una gran ocasión para darles una catada.

Un saludo.