Tracklist:
- Awake In Sleep
- Into The Past
- Spirited Migration
- Growing Slow
- Weather The Storm
- Flight Beyond
- Grasping The Awe
- A Depth Returns
Joder...y yo que tenía preparada la lista de lo mejor del año, llega a mis manos el primer trabajo de este dúo norteamericano, y a tomar por el culo, a rehacerlo todo. Porque de cabeza entran en una ya de por si excelsa lista de uno de los años más prolíficos en cuanto a discazos que un servidor recuerda. Procedentes de St. Augustine (Florida), Dark Castle practican un stoner-doom cargado de atmósferas y psicodelía. Stevie (guitarra/voz) y Rob (batería/voz) son los encargados de dar forma a este coloso sonoro, encargándose también de la sintetización que sustituye al bajo.
Varias son las influencias de las que beben Dark Castle, y muy diversas, pero sin caer en un eclecticismo vacío de contenido. Todo lo contrario, su música fluye con toda naturalidad, y los diferentes colores y texturas se integran perfectamente en el bello conjunto que los dos músicos filtran a través de tan especial caleidoscopio. Por un lado tenemos los temas más dinámicos, de una fuerza monolítica y tremendamente rítmica, propia de los primeros Isis o de Neurosis, y cuyos máximos exponentes son la inicial Awake In Sleep y Flight Beyond. Nos presentan en estos parajes los pasajes más arquetípicos del género, pero sin llegar a ser predecibles, y con la gutural voz de Stevie rugiendo con una furia al nivel de cualquier iracundo barbudo. De hecho, hasta el comienzo de Grasping The Awe, donde utiliza su voz limpia, no descubrimos que estamos ante una fémina (y toda una preciosidad, por cierto). Pero dónde en mi opinión alcanza Dark Castle plena magnitud es en los cortes más atmosféricos, en los que dan rienda suelta a su inmensa creatividad y amor por la psicodelia. Increíble es la canción que da título al disco, un minuto y medio de bellísimas guitarras españolas con aires orientales, que al menos a mí me dejó boquiabierto. Del mismo modo, Weather The Storm es otro viaje de recorrido inmenso, que te sumerge en las profundidades de un oceano oscuro, dónde la presión y los intermitentes fogonazos provenientes de peces abisales te rodean en un horizonte que se encuentra pegado a ti, pero que a la vez es infinito. Lo siento, probablemente esto no te diga nada clarificador, pero así me siento yo cada vez que llega este corte, y no podría expresarlo con otras palabras. El tema final, A Depth Returns, es la síntesis de gran parte de la propuesta de Dark Castle, y estoy convencido que hará las delicias de todo amante del stoner/doom más actual y progresivo, en la línea de Mastodon o Deadbird (otro grupazo que debo subir un día de éstos).
Impresionante debut de una banda que desde ya tiene nombre propio en la escena, algo al alcance de muy pocos elegidos. El horizonte que su creatividad y talento abre ante ellos, infinito, como su música.
Varias son las influencias de las que beben Dark Castle, y muy diversas, pero sin caer en un eclecticismo vacío de contenido. Todo lo contrario, su música fluye con toda naturalidad, y los diferentes colores y texturas se integran perfectamente en el bello conjunto que los dos músicos filtran a través de tan especial caleidoscopio. Por un lado tenemos los temas más dinámicos, de una fuerza monolítica y tremendamente rítmica, propia de los primeros Isis o de Neurosis, y cuyos máximos exponentes son la inicial Awake In Sleep y Flight Beyond. Nos presentan en estos parajes los pasajes más arquetípicos del género, pero sin llegar a ser predecibles, y con la gutural voz de Stevie rugiendo con una furia al nivel de cualquier iracundo barbudo. De hecho, hasta el comienzo de Grasping The Awe, donde utiliza su voz limpia, no descubrimos que estamos ante una fémina (y toda una preciosidad, por cierto). Pero dónde en mi opinión alcanza Dark Castle plena magnitud es en los cortes más atmosféricos, en los que dan rienda suelta a su inmensa creatividad y amor por la psicodelia. Increíble es la canción que da título al disco, un minuto y medio de bellísimas guitarras españolas con aires orientales, que al menos a mí me dejó boquiabierto. Del mismo modo, Weather The Storm es otro viaje de recorrido inmenso, que te sumerge en las profundidades de un oceano oscuro, dónde la presión y los intermitentes fogonazos provenientes de peces abisales te rodean en un horizonte que se encuentra pegado a ti, pero que a la vez es infinito. Lo siento, probablemente esto no te diga nada clarificador, pero así me siento yo cada vez que llega este corte, y no podría expresarlo con otras palabras. El tema final, A Depth Returns, es la síntesis de gran parte de la propuesta de Dark Castle, y estoy convencido que hará las delicias de todo amante del stoner/doom más actual y progresivo, en la línea de Mastodon o Deadbird (otro grupazo que debo subir un día de éstos).
Impresionante debut de una banda que desde ya tiene nombre propio en la escena, algo al alcance de muy pocos elegidos. El horizonte que su creatividad y talento abre ante ellos, infinito, como su música.
No hay comentarios:
Publicar un comentario